Lo que viene después: WEC 2017 6 Horas de Silverstone

Ya tenemos en el bolsillo la primera carrera del mundial de resistencia y tras el buen sabor de boca que nos a dejado la prueba es el momento de analizar lo sucedido en tierras británicas.

El equipo Toyota Gazoo con su modelo TS050 Hybrid hicieron un buen trabajo de preparación durante el invierno y obtienen su recompensa al doblegar a Porsche en Silverstone, aunque no fue fácil.

A finales de la pasada, campaña conocíamos la triste noticia de que Audi, una de las marcas más importantes en LMP1 de los últimos años, dejaba la competición. Esto nos dejaba con solo 2 marcas para luchar por la victoria absoluta, y daba la sensación de que el campeonato se quedaba un poco huérfano. Sin embargo y aunque se espera que llegue un tercer fabricante cuando antes, esta carrera nos a abierto, al menos en esta prueba, a un mundial con lucha cerrada entre ambos fabricantes.

El equipo Toyota apuntaba muy bien en clasificación, se habían puesto 1-2 y parecía que la carrera podía ser fácil, gracias al planteamiento aerodinámico presentado por Porsche. Pero una vez en carrera en 6 horas pasan muchas cosas y aunque Toyota se acabó llevando el gato al agua, en el seno de Porsche supieron inquietar a la marca japonesa y en algunas fases de la carrera estuvieron delante.

Dentro de Toyota tenemos la cara y la cruz, el nº8 pilotado por Sebastian Buemi, que hizo un sting final increíble para superar a pocos minutos del final a Porsche, de la mano de Anthony Davison, que se mostró muy sólido y Kazuki Nakajima lo hicieron casi todo bien, aunque el más destacado fue el piloto suizo. Sin embargo el Toyota #7 sufrió de lo lindo y no tuvo la carrera que esperaba. Primero sufrieron problemas en la barra estabilizadora, lo que obligó a cambiar el alerón trasero en una de sus paradas para subsanar dichos problemas, y para colmo cuando José María López se puso a los mandos por primera vez, a los pocos minutos perdió el control con el suelo resbaladizo y golpeó de manera violenta contra el muro de neumáticos, haciendo trabajar más de una hora a sus mecánicos para poder volver a la pista, aunque muchas vueltas atrás.

El equipo nipón a demostrado tener ritmo, pero no deben confiarse por qué Porsche no a estado muy lejos.

En el equipo Porsche LMP se mostraban satisfechos con el resultado, recordemos que decidieron montar la configuración aerodinámica de alta velocidad, pensando más en probar y ajustar reglajes para Le Mans, que para este trazado.Y que pese a todo el Porsche #2 pilotado por Brendon Harley, Earl Bamber y el veterano Timo Bernhard se colocaba líder a falta de 31 minutos para el final gracias a no cambiar los neumáticos en la última parada, solo que sus rivales si lo hicieron y tenían la estrategia de cara para ganar la carrera. Además en la fase intermedia de la prueba se colocaron ambos coches por delante de los Toyota, pero la lluvia no les vino bien y la marca japonesa recuperó su dominio.

Buen trabajo el de Porsche, que se mostró muy sólido y tiene ganas de dar guerra este año.

En LMP2 la victoria fue para el Jackie Chan DC Racing #38 que supo aprovecharse de las circunstancias y hacer una segunda mitad de carrera perfecta. La carrera parecía clara para el Signatech Alpine #36, que lideró con puño de hierro la primera mitad de la prueba sin dar opciones al resto, sin embargo cuando apareció la lluvia se diluyo y pese a tener uno de los mejores tríos de pilotos solo pudo ser 4º.

En GTE Pro el equipo Ford Chip Ganassi UK no tuvo rival nuevamente y se llevó la victoria, ambos coches tuvieron opciones pero fue finalmente el Ford #67 pilotado por Andy Priaulx, Pipo Denani y Harry Tincknell el que logró la victoria por delante de Ferrari y Porsche.

Porsche con su nuevo modelo 911 SRS demostró tener mucha velocidad y en algunas fases de la carrera parecían tener opciones a todo. Abra que estar atentos a Porsche también en los GTs.

Parece que este año los GTs pueden estar todas las marcas metidas en la lucha y veremos como gestionan el BOP, que tanta polémica ocasionó el año pasado.

En GTE Am tuvimos un final dramático, el Aston Martin #98 se las prometía felices para la victoria, pero en la última vuelta y a falta de 3 curvas para el final, el primero y el segundo se tocaban y esto dejaba la victoria en bandeja para el Ferrari de Clearwater Racing #61. En una carrera que fue dominada de principio a fin por el Aston Martin #98, pero que ya se sabe que las carreras no concluyen hasta la bandera a cuadros.